“Mi último día en Australia” suena terrorífico, ¿no? La
verdad no sé muy bien cómo vivirlo. Estos últimos días han sido como una
orilla: olas que van y vienen, trocitos de espuma que se quedan en la playa
pero mucha masa de agua que vuelve al océano. Y es que cada segundo es un
constante decir “adiós” y un constante decir “hola”. Recuerdos de hace unos
meses o semanas vuelven cada dos por tres a visitarme de manera inesperada.
Revivo distintos momentos, pero lo que estoy viviendo en este instante está ya difuminado.
Al abrir los ojos veo delante de mí una tela llena de colores, que no siguen
ningún orden claro. Pero tengo la esperanza que durante las 28 horas de vuelo
que me esperan consigue que esta sensación de encontrarme en tierras movedizas
desaparezca.
Tal y como ya sabéis, durante las últimas dos semanas he
estado visitando amigos que hice al principio de mi viaje. En una de estas
visitas me dijeron: “You have been like a boomerang in Australia” Muy cierto!
Empecé en Sydney e hice un gran loop que me llevo a conocer la naturaleza
salvaje de Tasmania, la actividad de Melbourne, la famosa Great Ocean Road,
Adelaide desde donde empecé la travesía por el red centre australiano hasta
llegar a Darwin, y entonces Brisbane navegando hasta Cairns y allí volar para
de nuevo aterrizar en Sydney.
Y yo ahora me pregunto: La fuerza de qué brazo impulsó ese
boomerang para empezar su viaje? Quién estaba esperando para cogerlo otra vez y
que no se escapara ni se perdiera por el aire? Aunque haya hecho el viaje
“sola”, sería muy egoísta y se alejaría mucho de la verdad decir que fui yo.
Porque ahora entiendo que aunque quizás fuera yo quien acababa combinando los
mejores vientos a favor, nada hubiera sido posible sin las personas que me han
ido acompañando, cogiéndome y dejándome seguir volando cuando el momento
llegaba. Por lo tanto agradezco des de lo más sincero de mi corazón a todas
esas personas que lo han hecho posible. Y con ello quiero decir también mi
familia y amigos en “Olot i comarca” al igual que mi familia en Alemania. Pues
es bien cierto que alguien antes ha tenido que pulir, crear y dar la forma
necesaria a este boomerang que soy yo hoy en día.
Ahora vuelvo, sin parar mi vuelo, con la certeza que otra
aventura está a punto de empezar y que alguien estará allí en el aeropuerto
esperándome, con la mano abierta para acogerme sobre una tierra que aun me es
conocida: Cataluña.
vola vola petit boomerang!!
ResponderEliminarAqui te estamos esperando. Big Thanks to all the people you met in Australia. Te esperamos para que te puedas preparar para el proximo vuelo. Abrazos y besos
ResponderEliminarOi tant que te esperamos! Preparados para recibir la llegada de nuestra "boomerang"!! Y dando todo el impulso necesario para los próximos proyectos. Hasta mañana, corazón!!
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